En nuestro país existen mas de 4 millones de personas mayores que viven solas. Algunos de ellos tienen a hijos o parientes cercanos viviendo en la misma ciudad o en algún lugar próximo. Durante el año, los hijos se encargan de “echar un ojo” al mayor supervisando actividades como la carga de medicación, el acompañamiento a citas médicas, la intervención en situaciones de emergencia y diferentes acciones puntuales que ayudar a que la persona mayor permanezca de manera independiente en su hogar. Pero ¿Qué pasa en el verano cuando esos familiares se van de vacaciones?
La persona mayor se quedará una temporada sola y sin ningún contacto cercano que realice esas tareas. Esta situación puede generar miedos y temores, así como frustraciones muy asociadas a la idea del “ser una carga para los hijos” y “dificultar las vacaciones de los hijos”. Nosotros sabemos que esas dos ideas son erróneas, pero no podemos desvalida ese sentimiento que es real en la persona mayor.
Por eso os damos algunos consejos sobre para saber como lidiar con la soledad de los familiares mayores en verano
En primer lugar, debemos plantearnos ¿Por qué no realizar una vacación en familia? En muchas ocasiones podemos adaptar nuestros destinos vacacionales y actividades a la convivencia con nuestro familiar. Siempre podemos coger un apartamento con una habitación de mes o un hotel con una cama extra. Esto hará que disfrutemos de unas vacaciones en familia sin la preocupación de que estará pasando a Kilómetros de distancia.
En caso de no poder plantear unas vacaciones en familia.
1 .Avisa a algún familia o amigo cercano de tu ausencia y de que tu familiar mayor estará solo unos días. En periodos más largos déjale un numero de teléfono de contacto y si lo ves necesario las llaves de la casa (siempre consensuado con la persona mayor) para su intervención en casa de urgencia
2. Avisa a algún vecino de tu familiar sobre tu ausencia, para que en caso de emergencia haya alguien cercano a quien acudir. Además, los vecinos mas cercanos siempre pueden echar un ojo y comprobar que todo va bien. En otras ocasiones en lugar del vecino puedes recurrir al poder de la red social: el panadero, el frutero o la peluquera donde tu familiar acude semanalmente.
3. Si tu familiar hace uso de recursos como Centro de día o Centro de mayores informa a los profesionales de tu ausencia durante una temporada por si detectan alguna anomalía en el comportamiento de tu familiar.
4. Llámale con frecuencia, a poder ser diariamente, siempre a la misma hora y al mismo teléfono. Intenta que la llamada no parezca excesivamente controladora. Interésate por sus actividades del día, la comida y en olas de calor recuérdale la importancia de la hidratación. Además ahora tenemos la oportunidad de realizar videollamadas de una manera mucho mas sencilla.
5. Utiliza dispositivos de monitorización. Existen en el mercado diferentes dispositivos que nos informan sobre el estado de nuestro familiar a través del análisis de rutinas del mayor. Saber si se toma la medicación, si se ha levantado o si ha salido a la calle es posible gracias a dispositivos como Beprevent.
6. Confía en el mayor. En ocasiones no somos conscientes de que ellos ya eran independientes cuando tu ni siquiera habías nacido. Es cierto con con la edad se pierden algunas habilidades y la sociedad cambia tan rápido que en ocasiones les cuesta adaptarse, pero saben perfectamente cómo vivir solos, es mas, probablemente ellos te enseñaron a ti a hacerlo
7. En casos mas extremos donde dejar sola a la persona mayor sea realmente un riesgo, acude a servicios de empleados de hogar y cuidadores a domicilio profesionales como los que ofrece A.I.D. Nosotros te recomendamos comenzar con servicios por horas y días alternos para no invadir en exceso la intimidad del mayor y que el proceso de adaptación sea mucho mas efectivo.
